Otro sueño peligrosamente estúpido.

Se nos dió por sembrar el sandbox tree (hura crepitans, árbol amazónico de frutas explosivas que al caer desparraman púas venenosas letales) en un club cuyo edificio se ve desde el balcón de mi casa.
El plan: dispararnos con un cañón a Fer y a mi -él es experto en calcular trayectorias aéreas-, desde la terraza, calculando caer en la pileta del club. En el aire nos convertimos en manatíes, claro.

Los cálculos son correctos. Desde el aire vemos que hay mucha gente en el club, asistiendo a un partido de tennis.

Nos ven caer al agua y entran pánico. Gritan, corren, y nosotros nos divertimos nadando como manatíes y gritandoles cosas. Maia estaba entre la multitud y nos reconoce, finge entrar en pánico, corre hacia nosotros y se queda de nuestro lado, cagandose de risa.

Caen un par de guardias de seguridad, uno con una linterna tamaño bazooka -blandiendola como tal-. Yo me asomo a la superficie y le digo "stop, ¡te callás!", y los tipos se paralizan. Maia les dice "¡se van de aca! ¡ahora!", y sin entender mucho se van...

Una vez que no queda nadie, pasamos a plantar el árbol en un rincón. Nos reímos de lo absurdo de la situación ("¿porqué teníamos que plantarlo aca?"). Lo plantamos, y nos damos cuenta de que llevamos el árbol incrrecto. Es un ficus.

PEEEERO ahí caen Yougr y Carnóf con un ropero enorme, y adentro muchas ramas de Hura Crepitans. Hay que sacarles las semillas para plantarlas... mientras las sacamos nos comemos un par.

Al final el sueño deviene en una especie de trailer sobre un futbol-tenis de minas voluptuosas en bikini que le pegan a la pelota con las tetas...

En fin... peligrosamente estúpido...